¿Cuándo es el mejor momento para adquirir un crédito hipotecario? ¿Y si pido un préstamo personal? ¿Qué pasa si no pago el total de mi tarjeta de crédito? Estas son dudas muy comunes que me llegan normalmente e incluso que tú y yo hemos tenido en algún momento. Pero ¿qué tienen en común? Que estamos usando dinero que no es de nosotros. Y hasta aquí no hay nada malo en ello. Los bancos nos pueden financiar a través de créditos y préstamos para poder adquirir bienes necesarios y que no podemos solventar con nuestro propio dinero. Ojo, dije necesarios. Este dinero, que no es de nosotros, por supuesto tiene un costo llamado: tasa de interés. Básicamente la tasa de interés es lo que nos cuesta utilizar ese dinero. A menor tasa de interés, es mejor, ya que nos cuesta menos.
Hasta aquí todo bien. Seguramente has usado una tarjeta de crédito, adquirido un crédito hipotecario y/o automotriz, o utilizado un préstamo personal, así que debes estar familiarizado. Pero ¿qué pasa en épocas donde leemos que la inflación está aumentando y pareciera que cada día se pone peor la cosa?
Te explico. Seguramente habrás leído que BANXICO (Banco de México) ha estado aumentando la tasa de interés. ¿Qué impacto tienen esos aumentos en mi bolsillo? Cuando BANXICO aumenta la tasa de interés implica que, por un lado, el rendimiento de instrumentos por ejemplo CETES aumente, incentivando a las personas a que ahorren e inviertan; y por otro lado ese mismo aumento en la tasa de interés hace que los créditos sean más caros, desincentivando el consumo.
¿Por qué hacen eso? Para controlar la inflación. Por eso la idea millonaria de “imprimir más dinero” para resolver los problemas de todos nunca se hará realidad. Al haber más dinero en circulación, hay un mayor consumo; al haber un mayor consumo, empieza a haber escasez de productos y por lo tanto un aumento en sus precios, generando una mayor inflación.
Entonces, ¿qué hacemos en este momento donde la inflación está aumentando al igual que la tasa de interés? Ser responsables con el uso de los créditos y préstamos. Y no te digo que no adquieras un crédito hipotecario, o que no pidas ese préstamo que te ofrecen. Mi sugerencia es hacer un uso responsable ya que mientras las tasas sigan subiendo, el costo de ese dinero cada vez será mayor y podemos meternos en problemas financieros importantes.
Por esta misma razón te comparto algunos consejos que te ayudarán:
• Calcula tu capacidad de pago: primero que nada analiza cuáles son tus ingresos y réstale todos tus gastos, para saber si puedes adquirir esa deuda sin caer en impagos.
• Compara utilizando el CAT (Costo anual total): recuerda que no siempre el crédito con la menor tasa es el más barato. El CAT te ayuda a saber el costo total tomando en cuenta por su puesto la tasa de interés, pero además las comisiones y cargos adicionales. De esta manera podrás tomar una mejor decisión.
• No utilices tu tarjeta de crédito para comprar bienes innecesarios. Hoy más que nunca es importante entender y aprender a utilizarlas responsablemente.
• En la medida de lo posible y si lo permite, adelanta pagos de esa deuda que adquiriste para que pagues la menor cantidad de intereses.
• Y por último, no te dejes llevar por la publicidad, recuerda que “nadie vende pan frío”, lo importante es comparar y analizar para tomar la mejor decisión de acuerdo a nuestras necesidades.
Más sobre el autor:
Francisco Montoya
Inicio su carrera a los 23 años como Asesor en Seguros protegiendo el patrimonio de las personas y después de 13 años lo sigue haciendo. Sin embargo, ante la oportunidad de llegar a más personas, desde el 2020 creo "Finanzas y Café", un proyecto que nació como un podcast, que ha llegado a más de 500,000 descargas, formando una comunidad de más de 21,000 seguidores.